De alguna manera entre las diferentes sesiones los pacientes van aportando su mirada y pensamientos al respecto de la crisis del coronavirus. Y en resumen les compartiré lo que discurre entre todos:
El coronavirus deseamos que "se" pase. Pero no "se" pasa. Lo que pasará es la cuarentena pero eso no significa que se vaya a ir el virus. Al menos de momento. Esto nos trae a la luz que debemos ser nosotros los que tengamos que adaptarnos a poder funcionar y volver a hacerlo pero diferente. Quizás pase un año hasta que estemos a salvo. Sin embargo esto es una buena oportunidad para cambiar. La psique individual y la grupal no cambian fácilmente. Quieren pequeñas modificaciones a sus formas de satisfacción pero no cambiar. Incluso si el cambio es favorecedor, nos cuesta la incorporación de nuevos sistemas. Una especie si no se adapta a tiempo se extingue. Y aquí debemos ser capaces de aprender a adaptarnos, desde el comerciante, el trabajador independiente y las empresas, pero sin dejar de lado las formas sociales de interaccion. No podemos tener el lujo de quedarnos "esperando". Hasta ahora la mayoría estaba expectante, pero ahora tendremos que pensar cómo cambiar la forma de discurrir social y laboralmente. Es más, la crisis económica tampoco es tan central ahora como el "cómo volver a discurrir como sociedad".
Muchas cosas que a veces veíamos como lejanas deberemos aprender a hacerlas cercanas si nos sirven para ponernos a funcionar. Y quién tarde en darse cuenta (como los países con el coronavirus) pagarán por su negación, como siempre.
Quizás debemos empezar a dejar de estar temerosos y angustiados y comenzar a pensar, por más que sea lo nuevo, lo desconocido (y angustiante frente al vacío), a preguntarnos cómo podemos seguir, diferentes, pero seguir. Y creo que el real desafío de toda psique individual y social es esa.
Esta gran pandemia traerá cosas horribles, dramas y penas, pero también es la oportunidad de descubrir cosas nuevas.
Creo que los empresarios, creativos y todo sujeto tiene que empezar a salir de la espera y empezar a decir "¿Y esto no lo podré hacer diferente de momento?". Quién sabe ¿no? Quizás todo esto nos traiga novedades que de otra manera tardaríamos mucho. Hay empresarios que están reduciendo personal, ERTES y demás... bien... pero eso es un simple paliativo, un seguir igual a ver qué tal se resuelve. Tenemos que comenzar a pensar en lo nuevo lo diferente lo creativo para seguir adelante, de contrario... no sobrevivirán esas empresas.
Yo por mi parte, como siempre, los podré atender a distancia, como comencé hace mucho, cuando todos se agarraban la cabeza ante lo nuevo, y posiblemente ahora lo tengan que hacer todos... somos chistosamente contradictorios. Pero en realidad es la resistencia a nuevas formas de satisfacción, lo nuevo no suele ser tan bien recibido hasta pasado un buen tiempo... Salvo que haya una tragedia y lo nuevo sea la salvación.
Dejar de observar y comenzar a cambiar es la propuesta que dejo sobre la mesa.
Saludos a todos
Sergio Alonso Ramírez
Psicólogo Psicoanalista
sergioalonso2000@gmail.com
Totalmente de acuerdo.
ResponderEliminarEl miedo al cambio es quizás parte de la psique del sujeto. Es ahí en donde se amenaza su supervivencia, ya lo decía Melanie K. Y lo retoma el buen Pichón para hacer referencia al aprendizaje como posibilidad de cambio. Aprendemos todo el tiempo.
ResponderEliminarGracias por compartir. Saludos!