Estaba viendo este programa y me parece interesante poder hacer una analogía entre lo que sucede a los protagonistas de este programa y lo que pasa en la psique humana.
Básicamente es un directivo de alto cargo en una empresa que entra de incógnito en su propia empresa para “ver qué sucede” en sus establecimientos.
La idea si bien “parece” original, en principio nos dice algo más. Que el sujeto
no sabe que sucede en su propia empresa (psique). Ahora lo interesante es la reacción más común que he podido observar.
no sabe que sucede en su propia empresa (psique). Ahora lo interesante es la reacción más común que he podido observar.
En general, el jefe, se encuentra con anormalidades en su empresa. Las cuales muy dispuesto se encara a solucionarlas luego de que acabe su pequeña excursión por aquello que supuestamente dirige. Sin embargo hay algo llamativo, la resolución en general tiene que ver con solucionar por allí donde pasó y dar dinero y premios a quienes estuvieron a su lado. Punto. Algunos alimentando su ego suponen que están realizando un bien y se sienten todos orgullosos de sus regalos desde la magnificencia de su lugar a la persona que se han cruzado. U organizan una asociación para poder ayudar sólo en esos casos. Por ejemplo le dan una beca de estudio a uno de sus empleados, o ayuda a una persona con la salud de su hijo, etc. En lo empresarial sólo modifican aquello que han visto.
Sin embargo hubo uno solo, el presidente de una hamburguesería que sólo atendía a clientes en coche, que hizo algo diferente. El hombre no sólo siguió las pautas del programa en beneficiar a aquellos con los que se había cruzado, sino que se planteó que había algo en su sistema que no estaban viendo, y que tenía que plantearse otra forma de operar en la empresa para poder tener ojos y oídos y enterarse de lo que realmente sucedía, no en ese momento, sino en todo momento. Ya no se trataba de que arreglen en una tienda algo, sino que puedo ver el fallo en sí mismo y en su sistema de funcionamiento general pretendiendo así generar una forma de poder ver y solucionar aquello que la empresa pudiese.
Esto me hace pensar en las diferentes terapias de la actualidad donde le ofrecen a la persona “quitarle el síntoma” y dejarlos con la enfermedad, en vez de poder hacer una evaluación de aquel sistema (sujeto) que produce el síntoma y empezar a observar el funcionamiento desde una perspectiva más amplia.
Si volvemos al ejemplo, aquellos que sólo solucionaron lo que vieron, lo único que realmente hicieron fue reparar su ego frente a una pequeña parte de su sistema. Pero a la vez vendándose los ojos frente a todos los otros establecimientos de la empresa y empleados que vivían esa situación u otras.
De nada sirve ayudar al hijo de un solo empleado (bueno de algo sí sirve) cuando se está dejando fuera a todos los otros. De nada sirve que no se tire comida en una sucursal cuando no saben que está sucediendo en las otras. Tampoco ascender a un empleado que dada la política de la empresa sabe que no lo ascenderán. A pesar del acto que realizan es una forma de taparse los ojos y oídos. Si el “jefe” no genera un sistema para poder conocer todos los aspectos de su empresa y empleados, lo que ha hecho es simplemente una pantomima para su ego.
Y lo más interesante es que esto sucede tanto a nivel particular como empresarial, donde en muchas empresas “no quieren saber cuáles son las consecuencias de sus actos y decisiones”, se quedan con la omnipotencia (del “yo”) ignorando aquello que ellos mismos están produciendo. Como si pudieran utilizar la prepotencia para no verse frente a un espejo que devolverá una imagen que se han empeñado en ocultar.
Podríamos decir que el problema obliga al sujeto a abrir un poco los ojos. Unos pretenden volver a cerrarlos y otros aprovechan para intentar abrirlos del todo. Como sucede frente a toda conflictiva.
Sergio Alonso Ramirez
Psicólogo - Psicoanalista
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