"Hay algo que debéis entender de mi forma de trabajar. Cuando me necesitáis y no me queréis, debo quedarme. Cuando me queréis, pero ya no me necesitáis, debo irme... Es un poco triste, pero es así"- película: La niñera mágica.

(Sin embargo, a pesar de mi ausencia física, me tendréis allí donde me necesiten)


http://psicosujeto1.blogspot.com.es/

5 de julio de 2013

Olores corporales

Todo el mundo tiene sus peculiaridades, tanto psíquicas como físicas. Pero sabemos que las mismas están íntimamente relacionadas. Ahora bien, hay personas que pueden llegar a aparecer como "enigmáticas" en la sociedad actual por ciertas características particulares.
Me refiero a la gente que tiene fuertes olores corporales. Estas personas que pueden llegar a oler a sudor de forma muy fuerte y/o también el aliento.
Hasta aquí podemos pensar que se trata solamente de
un problema meramente físico, sin embargo hay algo enigmático en los casos que he podido ver: Cuando alguna persona les señala sobre dichos olores, no parecen mostrarse ni preocupados ni molestos. Hay como una especie de negación ante la obviedad. Y más llamativo aún es que no se trata de gente con problemas olfativos. Aún así, al saber sobre esto, las personas parecen tener una actitud entre relajada, despreocupada y negadora. Como sí estos olores, que tanto parecen molestar al entorno, no les significasen un problema. En algunas ocasiones, luego de un tiempo puede que emprendan alguna acción "suave", pero si no funcionan se quedan tranquilos. Como si les dijeran "se está prendiendo fuego la casa" y no hiciesen nada, luego tirasen un vaso de agua y se quedasen tranquilos viendo como la misma se hace cenizas.
En este caso nos referimos a los casos particulares donde parece ser que este olor repelente más que incomodar parece satisfacerles.

Si bien los olores cumplen muchas funciones, como la atracción, desde el mundo de la biología y los animales, sabemos que también tienen otras funciones. Una de ellas es "repeler". Lo llamativo de los casos que he visto era que al saber sobre estos olores, y entendiendo la repulsión que podían generar, se quedaban tan tranquilos. Incluso una chica llega a decir "creo que el gato ha meado en el bolso", y se trataba del mismo que llevaba encima. Al parecer había un aspecto confortable con la repulsión. Sin embargo, al menos en los casos que he visto, esta repulsión no era del todo casual. Eran personas que de alguna manera rechazaban el exterior. En algunos casos intentado evitarlos, en otros generando un rechazo de afuera hacia si mismo. Como si el exterior tuviese algo del orden de lo doloroso y/o angustiante que tuviera que mantenerse "lejos". Pero sabemos que de algo goza todo sujeto y que los síntomas, pueden generar angustia, pero satisfacen "otra cosa". Es decir, no son necesariamente aleatorios.
Posiblemente el organismo de estas personas pudiesen tener una predisposición a ello. Sin embargo algo también puede contradecirlo. Otro caso que conocí en un estado de sumo estrés, en situación de persecución laboral, en un momento donde se sentía muy atacado, su cuerpo generaba olores fuertes y repelentes. En este caso la persona se percataba, se avergonzaba e intentaba evitarlo. Sin embargo parecía que algo más allá de su conciencia hacía que esto se produjese (refiere que se sentía atacado y sólo le pasaba en el trabajo).
Casos en apariencia contradictorios con respecto a este último ejemplo, pero quizás no lo sean tanto.
Todos lograban algo... "repeler a los que lo rodeaban". Cada uno con sus historias o momentos particulares. Uno como reacción y los otros como algo continuo.
Sin embargo este repeler también tiene que ver con otras cuestiones, porque uno se puede preguntar si el único lugar que pretenden es la soledad. Y en realidad no era la soledad lo que buscaban, sino la compañía de la única persona que, por más olores repelentes tuviesen, los querían igual, inclusive les parecían "lindos": Mamá.

Como dice una madre amiga mía: "El olor a caca de mi hijo es la única que soporto" (y la propia). Y a su vez el festejo por todo el acto de defecar que hace toda madre frente a su hijo.

En estos casos los olores fuertes y repelentes eran, como siempre, una búsqueda de amor, uno particular, uno de aceptación total "a pesar de todo"... el amor materno.
Como sí con su olor dijesen "el que me ame, me amará a pesar de todo... como cuando era un niño", y como tal, sólo aceptaban que se acerque realmente a ellos aquellas personas que los querían con su repelente y atrayente olor-amor.
En ambos casos repelían el exterior y terminaban siempre en una escena de conflicto que su olor corporal anunciaba como el fin de una relación con el exterior. El olor aparecía como el primer significante de una serie de otros que generaban un conflicto que hacia que todos los "rechacen", ya no por el olor, sino por una serie de otras cuestiones que ponían en escena. Un sujeto terminaba "harto" de todos, y con el otro "todos terminaban apartándose de él" (era un ella).  Pero ambos referían una relación de completa aceptación con su mamá... una mamá que los quiere "a pesar de todo" incluso el olor, "no como los demás". Estos "demás" era actores de una escena, que finalmente es una escena de amor. Uno de ellos refería: "Cuando adolescente me acuerdo que me escondía detrás de mi pelo... no quería que nadie me viese". El rechazo que sentían con respecto al mundo exterior, lo hacían especular a través del olor por el cual ahora los demás los rechazaban, o amaban "a pesar de".

A su vez cabe resaltar que es lo que se ha podido ver en estos casos, sin embargo este significante puede tomar diferentes carices dependiendo cada uno de los casos, ya que si bien un síntoma puede parecerse a otro, su significado y constitución pueden ser totalmente diferentes.

Sergio Alonso Ramirez
Psicólogo - Psicoanalista

Todo el que quiera participar de los foros puede hacer en facebook: https://www.facebook.com/groups/hipnosisirve/






2 comentarios:

  1. Me alivia leer esto: "conocí en un estado de sumo estrés, en situación de persecución laboral, en un momento donde se sentía muy atacado, su cuerpo generaba olores fuertes y repelentes", me alivia porque viví un mobbing prologado en el tiempo y mi olor corporal era indescriptible, al principio lo tenía solo entre semana, al final se me hizo permanente. Lo penoso es que la psiquiatra de la Seguridad Social, lo calificó como delirio,es lo que dejó escrito en mi historial, claro que también me preguntó ¿qué pasa no te lavas?, perfecto, si lo hubiera hecho desfilar por su consulta a toda la gente que tuvo que padecer mis efluvios la otra opción era la del "no se lava" por lo que se ve.

    ResponderEliminar
  2. La primera persona que me hiso saber qué yo tenía olor,fue una vecina. Me recomendó una crema odorono de rexona. El olor desagradable a axila me acompaña hasta hoy,afecta mi vida sexual obviamente. Pero este olor me recuerda que quizá después de dos abusos sería normal mi cuerpo encuentre la excusa para que no lo toquen. Y hay un dolor ginecólogico desde la menstruación y me digo que fuerte el rechazoypor género y bueno ser mujer me ha traído dos abusos,porque no rechazarlo.

    ResponderEliminar

psicosujeto psicoanalista Sergio Alonso Ramirez Atención online internet Madrid centro La Latina Rios Rosas Argentino psicólogo análisis analista psicología psicoanálisis ayuda angustia depresión amor tristeza felicidad Obsesiones consultorio consulta psicológica psiconalítica Trastorno por déficit de atención e hiperactividad, depresión, terapia de pareja, TOC trastono obsesivo compulsivo, histeria, trastorno por conversión, ataque de pánico ansiedad, miedo, fobia, sexualidad, afecciones físicas con implicancia psicológica capital La Latina bruxismo, dolores 28005 28010 atención on line online www.psicosujeto.com. Buen Bueno